Partiendo del reconocimiento del espacio en el que nos encontrábamos y su historia marcada por el racismo y el colonialismo, escuchamos a las participantes relatar los procesos de despojo que enfrentan los pueblos originarios de Filipinas, Papúa Occidental, Guatemala, Canadá, Panamá, Colombia, Chile y Perú, entre otros países. Se compartieron también historias de resistencias, especialmente desde la mirada de las mujeres y personas dos espíritus (las personas de las Primeras Naciones en quienes conviven los géneros masculino y femenino), destacando las afectaciones que el extractivismo tiene en nuestros cuerpos diversos.